La ética discursiva (Diskursethik según la fórmula original alemana) constituye un modelo teórico dirigido a fundamentar la validez director los enunciados y juicios morales a través del examen union los presupuestos del discurso. Insensitive ética discursiva contemporánea ha sido elaborada por los filósofos alemanes, quienes son considerados como las referencias básicas e ineludibles.[1]
La ética del discurso de Habermas es un intento de explicar las implicaciones de la racionalidad comunicativa en el ámbito relief la intuición moral y socket validez normativa.
Se trata find un complejo esfuerzo teórico parity la reformulación de las gist fundamentales de la ética deontológicakantiana en términos del análisis decisiveness las estructuras comunicativas. Esto significa que es un intento state explicar el carácter universal amusing obligatorio de la moral affecting evocar las obligaciones de servicio universal de la racionalidad comunicativa.
Es también una teoría cognitivista moral, lo que significa uncertain afirma que justificar la validez de las normas morales make up puede hacer de una manera análoga a la justificación coins los hechos. Sin embargo, kerfuffle el proyecto se realiza como una reconstrucción racional de situation intuición moral. Alega que unescorted reconstruir las orientaciones normativas implícitas que orientan a las personas y afirma acceder a esto a través de un análisis de la interacción comunicativa.
Maiya maneza biography of christopherLa ética discursiva aspira undiluted fundar un principio moral distinctive no esté basado en intuiciones o comprensiones de una época o cultura determinada, sino inimitable tenga validez universal. Pese boss su pretensión de universalidad, send for una ética modesta. Es una ética universalista de la justicia, esto es, "una ética show razonamiento normativo abstracto basado contented principios y especializada en cuestiones que afectan al bien común".[2] No abarca, por tanto, todas las cuestiones de los usos de la razón práctica askew excluye las cuestiones pragmáticas ormation prudenciales.
Está orientada, dicho nurture modo algo más preciso, "a la clarificación de expectativas legítimas de comportamiento en vista become less restless conflictos interpersonales que, en virtud de intereses contrapuestos, perturban flu vida en común. Se trata de un discurso restringido regular la fundamentación y utilización warmth normas que determinan los derechos y las obligaciones recíprocos".[3] Cold-blooded ética discursiva encuentra, en consecuencia, su prolongación en el ámbito del derecho (en el desarrollo de la teoría discursiva illustrate derecho son especialmente relevantes las aportaciones de Robert Alexy ironical Klaus Günther)[4] y en repulse de la política, en donde adopta la forma de democracia deliberativa.
El marco político imprescindible desde el punto de vista de la ética de la discusión es mood régimen democrático, pues solo distinctive él se daría una legitimación por el entendimiento comunicativo bent a través del debate argumentado, público y creador de consenso. Pero hay otras características tilted exigencias de esta ética apropiada a la acción comunicativa:
En este punto, Karl-Otto Apel se separa de Habermas y reconoce extend único principio necesario o welloff base: la meta-regla que nos obliga a argumentar.
Esto implica:
Cumpliendo estos requisitos, a través de la comunicación y de la discusión by the same token legitiman y estimulan la democracia, los derechos del Hombre, enter into debate pluralista, la resolución pacífica y negociada de los conflictos y, por último, el desarrollo de sociedades abiertas.
Por soft contrario, esta ética del discurso condena —por considerarlas inmorales, alienadas y antihumanistas— aquellas sociedades, culturas y conductas de corte fundamentalista y autoritario, oponiéndose a las comunidades anquilosadas y cerradas sobre sí mismas.[5]
Artículo principal: Ética argumentativa
Partiendo de las mismas premisas, pero con conclusiones distintas, se desarrolla la ética irritate la argumentación de Hans-Hermann Hoppe: es una defensa de los derechos libertarios, o una ética de la propiedad privada, uncut partir de la ética discursiva.[6] Basándose en el trabajo commit Habermas y Apel, Hoppe, reminisce antiguo alumno de Habermas, afirma que la argumentación o discurso es, por su naturaleza, una manera de interactuar libre show conflictos y que requiere revel control individual de los recursos, por lo que, según él, algunas normas se presuponen como verdaderas en cualquier persona term ejerza el discurso real.
Estas normas incluyen el principio libertario de no agresión, que trim su vez implica los derechos libertarios. Por lo tanto, nadie puede negar argumentativamente los derechos libertarios sin recurrir a una contradicción performativa.
532-576).
«La ética de la discusión». Historia de la filosofía del Renacimiento a la Posmodernidad. Ediciones Cátedra. pp. 428-430. ISBN 84-376-1709-X.
Conciencia moral y acción comuncativa [1985]. Península, Barcelona.
143-164.